Antonio Pérez Carmona
Las siete enfermedades mortales de la gerencia
Autor: E. Deming
Las enfermedades son síntomas indudablemente de una gestión inefectiva.
1.- La falta de constancia en los propósitos:
Manifiesta abiertamente que la empresa carece de estrategia a largo plazo para sostener y mantener un negocio. Se explica que, dejar una iniciativa sin apoyo o en medio del proceso de implementanción crea desconfianza y un mensaje ambiguo hacia los trabajadores.
2.- Énfasis en las ganancias a corto plazo:
Esta enfermedad está íntimamente relacionada con la pérdida de calidad y productividad. Es un claro ejemplo de manipulación del cliente, vender productos que no satisfagan las necesidades de los clientes y desatender la garantía.
3.- Evaluación por rendimiento, clasificación de méritos o revisión anual de resultados:
Es, en resumen, la ausencia de seguimiento y el debido control de las actividades útiles para los resultados. Es fácilmente identificado por el seguimiento tardío o inexistente.
4.- Movilidad de la directiva:
Es un problema asociado con la contratación correcta y la instauración de actividades retadoras para los trabajadores con el objetivo de que busquen un desarrollo interno. Asimismo, la rotación interna de los gerentes impide que se consoliden los dos años – según Deming- que requieres un trabajador en conocer un puesto profundamente. Minando, de esta forma la relación con el cliente.
5.- Dirigir una empresa basándose en únicamente cifras visibles:
Es un fenómeno que está asociado a analizar exclusivamente los estados financieros y el balance anual de una empresa. Existen actividades que influencian el resultado como son las relaciones laborales, clima laboral, entrenamiento, desarrollo del compromiso. Esta afirmación está relacionada con la falacia de McNamara que nos recuerda la importancia de la información aparentemente no cuantificable en la gestión de una empresa. Es importante recordar que esta afirmación, en la actualidad, y según Salim Ismail, en su publicación Organizaciones exponenciales, es contradicha dado que indica que todo es medible y cuantificable con ayuda de la tecnología.
6.- Costos médicos excesivos:
El deterioro de la salud de los empleados hace que el absentismo por enfermedad incremente el costo final de los productos o servicios, en especial cuando se trata de operarios expertos.
7.- Costo excesivo de garantías:
La reposición de productos y el establecimiento de sistemas de atención al cliente hace perder mucho dinero a las empresas todo esto debido a la insatisfacción del cliente con el producto o servicio.
Finalmente, la mayor reflexión obtenida de esta lectura, está asociada con una frase del autor y que ciertamente comparto: “No es suficiente hacer lo mejor posible. Debes saber qué hacer y luego hacerlo lo mejor posible”.
Fuente: Quality Productivity and Competitive Position (W. Edwards Deming 1982)
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